10 de abril de 2011

Jacinta Pichimahuida

Yo creía que mi mamá solamente reproducía, como podía, algunas de las palabras que yo más a menudo emito. Pero no en español, para eso a esta altura ya está ducha, sino en inglés. Cómo ya lo conté acá, mi mamá ya aprendió a decir "zenkiu", "jalou" y "no spík in íngli" cuando alguno que sí lo habla quiere entablar una conversación con ella.

Como dije, "creía". Hace un tiempito Sebastian y yo estábamos en Bahía, hablando de nada trascendente y en este idioma que mi mamá decididamente no habla, cuando ella agregó (o mejor dicho, preguntó):

-Shrrrilly???

La pregunta en ese momento fue como un gol de Messi, de esos perfectos que hace para el Barca; no así para su propio seleccionado. Cuadró divinamente. Sebastian y yo automáticamente dejamos de hablar, nos miramos con los ojos como 2 huevos fritos, la miramos a mi mamá y le dijimos, al unísimo:

-Quééé?!?!
-Ay, chicos, de verdad piensan que no entiendo nada de lo que hablan? -dijo ella, totalmente superada- Hija, nunca subestimes los conocimientos de una vieja docente como yo.
-Ay, a ver, demostrálo. Decíte algo. A verrr???
-Hija, yo aprendí inglés en la escuela, qué te creés?
-Estoy esperando...
-Jái ham shrídin, jái ham shráitin, jái ham de máder. De fáder is in de bázrum. Jái ham lerrrnin.
(...)
-Listo.
(...)
Estallamos de la risa, le expliqué a Sebastian el temita de la "R" de mi mamá (es chaqueña y todavía, a veces, dice "pesho" en lugar de "perro") y, sin quererlo, adoptamos su acento. Empezamos con "Shrilly", ahora le damos "shr" a todas las palabras que no sólo empiecen sino que tengan alguna R. Ahora hablamos inglés chaqueño. Entre nosotros, claro.

Mi mamá tiene mucho, mucho talento. Y la remato, aunque no tenga naaaada que ver, con el talento que tiene para no poder, ni haciendo su mayor esfuerzo, identificar nombres con caras y para expresarlo de manera poco convencional:

(SMS de Bahía a Buenos Aires, mirando gala de expulsión de Gran Hermano)
-Dice Diego que hoy sale X. -digo yo.
-Ese es el chico que se disfraza de mujer? -responde ella, haciendo clara (para quienes la conocemos) alusión a Alejandro, el muchacho que nació mujer y quiere el cambio de sexo.

Para quienes aún tengan dudas de mis raíces y de por qué soy como soy, la respuesta está a la vista.

5 comentarios:

  1. Pato, la generación que nos precede tiene un serio problema de fonética. Va más allá de la Provincia del Chaco, Estados Unidos o Groenlandia. Mi mamá es de Villa Mitre y no puede decir Chilli. Dice "Shilli". Y el inglés, bueno, qué decirte. Besotes.

    ResponderBorrar
  2. Me hiciste reflexionar... es muy cierto lo que decís. Recuerdo que mi papá, para que la gente creyera que él sabía inglés, decía "el presidente BASH" (se refería a Bush, claro). Él era conciente de sus límites, que evidentemente lo aquejaban. Mi mamá y su amiga Normita, la que dice "Dush" en lugar de Deutsch (pronunciado "Dóich), no. Buena observación, Maru, buena observación. De todos modos, el Jai ham shrídin de mi mamá no tiene desperdicio, te digo!
    Beso grandote :)

    ResponderBorrar
  3. Muy gracioso lo que hacía tu papá!

    ResponderBorrar
  4. Patita sos Bahiense pero?

    Algunos tendrán sus acentos, otros les ponemos "pero" al final de las oraciones. Juro que no me habia dado cuenta hasta que me lo hizo ver un amigo foraneo.

    Besos, pero.

    ResponderBorrar
  5. Soy re-Bahiense, pero!!
    Y de más purretita usaba ese "pero" a morir. Ahora ya no, el vivir en Buenos Aires por tantos años fue suficiente para cambiarlo por el "tipo" que tanto, tanto aborrezco. Ahora ya lo dejé. Se me había pegado sin quererlo.
    Ahora se me pegó el "mmmm" para decir asentir algo. Así hablan acá. Porque ahora estoy del otro lado del charco, en gringolandia.
    Lo bueno de todo esto es que se ve que tengo gran capacidad de adaptación.
    Otro beso, pero :)

    ResponderBorrar